domingo, 30 de octubre de 2011

METEORO


Meteoro es un fenómeno luminoso que consiste en un cuerpo celeste de apariencia estelar que se desplaza sobre el fondo del cielo oscuro, a veces dejando detrás una estela persistente. Su definición popular es la de estrella fugaz.

Los meteoros se forman cuando un meteorito que se encuentra en el espacio entra en la atmósfera terrestre y, por efecto de la fricción, se quema en las capas altas de la atmósfera. A veces, cuando nuestro planeta cruza la zona donde pasa habitualmente un cometa, se produce una gran caída de rocas que fueron expulsados del cometa hace mucho tiempo.
Eso hace que se produzca una gran caída de estrellas fugaces, provenientes del mismo lugar del cielo.Se las llama lluvias de meteoros.
Como la Tierra pasa anualmente por los mismos
lugares, se producen en las mismas fechas.
Es posible recoger residuos de estrellas fugaces: basta fundir nieve de montañas poco holladas por el hombre y que haya permanecido en ellas el mayor tiempo posible. Después de filtrar el agua resultante, en el filtro quedan pequeñas partículas, generalmente férreas, separables por un simple imán.

De día hay meteoros pero es difícil su observación. Sólo son detectables con técnicas de radio astronomía ya que las partículas que penetran a gran velocidad ionizan los átomos de la atmósfera. Estos trayectos ocupados por iones reflejan las ondas del radar detectando así la presencia diurna de meteoros. Un meteoro no debe confundirse con un Meteorito, mientras el primero consiste en el fenómeno luminoso, el segundo es un cuerpo sólido más o menos grande que provoca este fenómeno.
Los meteoros más luminosos, que superan la magnitud estelar de -4m llegando hasta -22m, son habitualmente llamados bólidos o bolas de fuego.










Ana Sánchez 1ºC

martes, 25 de octubre de 2011

Los agujeros negros



El argentino Ezequiel Treister, liderando un equipo internacional de astrónomos de la NASA, descubrió que los agujeros negros han existido desde los mismos orígenes del Universo, creciendo y evolucionando conjuntamente con la galaxia que habitan.

Con ayuda del telescopio Chandra, los científicos de la NASA consiguieron información que muestran que los agujeros negros supermasivos existieron ya desde las primeras galaxias del Universo, hace aproximadamente 500 millones de años, revisando 200 galaxias distantes.
Ezequiel Treister dijo: "Pudimos confirmar la existencia de agujeros negros supermasivos en las primeras galaxias del Universo, después del Big Bang”

El reporte de la Nasa indica que las observaciones determinaron que entre el 30% y el 100% de las galaxias más lejanas contienen en su interior agujeros negros masivos que actualmente continúan creciendo.
"Los físicos dedicados al estudio de los agujeros negros buscan descubrir cómo se formaron los primeros agujeros negros supermasivos y cómo crecen y evolucionan. Los nuevos resultados de Chandra demuestran que este crecimiento paralelo comenzó antes de lo pensado, tal vez desde el mismo origen de ambos (de las galaxias y los agujeros negros)", indica la NASA.
El informe de la Nasa señala que se había pensado que los primeros agujeros negros habrían cumplido la función de "limpiar" la "niebla" cósmica, la información reciente del Chandra demuestra que en realidad no es así. Es decir, este descubrimiento demuestra que mucho de lo que se conoce sobre los agujeros negros aún es muy limitado.
Hasta ahora conocemos los agujeros negros clasificados en dos tipos:
1. Supermasivos: son colosales y pueden tener el tamaño de muchos millones de veces el del Sol.



Agujeros negros supermasivos, enormes formaciones situadas en el centro de las galaxias





2. Masa estelar: son mucho más pequeños y cuentan con un tamaño similar al de una estrella.


Agujeros negros de masa estelar, mucho más pequeños






Pero astrónomos de EEUU identifican al agujero negro más pequeño que se conoce.
En WASHINGTON.- Un grupo de científicos de la NASA acaba de identificar al agujero negro más pequeño que ha visto hasta la fecha, con una masa cuatro veces superior a la del Sol y el tamaño de una gran ciudad




Agujero negro más pequeño y ligero









Y científicos de la Universidad de Durham han encontrado el eslabón perdido entre los agujeros negros pequeños y los supermasivos tal como el de la siguiente fotografía:




El eslabón perdido de los agujeros negros:
El intermedio










Yolanda Quilez Quilez 1ºC bachiller


lunes, 24 de octubre de 2011

UN AVANCE EN LA ASTRONOMÍA:

En este primer artículo me gustaría aportar algo más de información acerca de un tema que me parece que ha ayudado bastante en la investigación. Ese tema es el de la invención del telescopio y de una de las primeras personas que comenzaron a usarlo para investigar.

Aunque no sea muy conocido Hans Lippershey fue el primer hombre capaz de inventar un objeto capaz de mostrarnos que hay en el cielo y que es lo que nos rodea. En la primera década del siglo XVII Hans diseñó lo que él llamo “TELESCOPIO”.
Años más tarde en 1609 Galileo Galilei creó su propio telescopio, era un telescopio de refracción, con lente convexa delante y una lente ocular cóncava. Galileo fue uno de los primeros hombres que miro al cielo y se atrevió a decir que la Tierra giraba alrededor del Sol, lo que contradecía la creencia de que la Tierra era el centro del Universo. Al decir esto se opuso a la iglesia. Se negó a obedecer las órdenes de la iglesia católica para que dejara de exponer sus teorías, y fue condenado a reclusión perpetua.

Galileo Galilei


A pesar de ello Galileo realizó observaciones al cielo y las estrellas; con relevantes descubrimientos que lo han llevado a merecer el nombre del “padre de la ciencia moderna”.
Galileo demostró valor y gracias a él años más tarde se han seguido realizando investigaciones. Le debemos bastante porque sin el uso del telescopio ( ahora mejores) no podríamos saber que es lo que nos rodea. Yen mi opinión es de gran mérito e increíble que alguien tenga tanta imaginación como para crear un objeto como es el telescopio a partir de la nada y lo que aun tiene mas mérito, es conseguir que funcione.

Imagen del telescopio que creo Galileo:Publicado por: ErikaRemiroMuñecas 1ºC

sábado, 22 de octubre de 2011

¿Por qué es negro el espacio? Paradoja de Olbers


Muchas veces damos por verdaderas ciertas afirmaciones sin ser conscientes de que algunas se contradicen entre sí. Sostenemos como cierto que el universo es infinito y que el cielo nocturno es negro. Si nos paramos a pensar podemos ver que existe cierta contradicción.
Si suponemos que el universo es infinito debe de contener un número infinito de estrellas luminosas, y por tanto el cielo nocturno debería cegarnos con una poderosa luz (ya que estaría cubierto de ellas). Por lo tanto ¿por qué tenemos una visión heterogénea del cielo nocturno?
La primera aparición escrita de la paradoja, de la que se tenga constancia, es de Thomas Digges (1576), siendo más tarde descrita por Johannes Kepler (1610) y Edmund Halley (1721). Estos autores la usaron como argumento para “demostrar” que el universo no podía ser infinito (el cielo nocturno no sería oscuro), siendo que en aquella época se consideraba al universo infinito, estático e inmutable.
Wilhem Olbers, un astrónomo del siglo XIX, intentó descifrar el enigma durante años, hasta el punto de que la pregunta de por qué es negro el cielo nocturno se acabó conociendo como la paradoja de Olbers. Olbers sugirió varias soluciones, aunque al final decidió que la respuesta era que el universo está repleto de partículas opacas que impiden que llegue a la Tierra la luz de las estrellas lejanas. En resumen: existen infinidad de estrellas invisibles, pero veladas por el polvo. Recuperó así la idea “agradable” de un universo infinito y eterno.


Sin embargo, tras la muerte de Olbers, los científicos calcularon que la luz procedente de todos aquellos soles debería calentar lo suficiente cualquier partícula como para que también brillara. Y las cosas volvieron al principio: una paradoja.
Sólo después de que Vesto Slipher, Hubble y otros descubrieran, en la segunda década del siglo XX, que el Universo estaba en expansión, pudo darse una explicación satisfactoria: en la década de 1960, el astrónomo estadounidense Edward Harrison llegó al entendimiento y solución actuales de la paradoja. Según afirma en su libro Darkness at night: A Riddle of the Universe, el firmamento nocturno no está iluminado porque en realidad el Universo y las estrellas no son infinitos. Lo que en realidad resuelve la paradoja es la misma expansión. Si el Universo se expande es que no es infinito. No lo es ni en el espacio ni en el tiempo. La finitud es la clave. 

 (vídeo del American Museum of Natural History)
              La paradoja de Olbers esconde una pregunta mayor: ¿es el Universo finito o infinito?
   Este video muestra hasta donde llega nuestro conocimiento de las dimensiones del Universo

Además, sabemos que la luz puede tardar millones de años en viajar desde las estrellas más lejanas hasta la Tierra, de manera que cuando observamos el espacio, estamos mirando atrás en el tiempo. Ya en el siglo XIX Edgar Allan Poe escribió: “en la oscuridad del espacio vemos la nada que existía antes de que nacieran las estrellas” Y según Harrison, el poema de Poe era básicamente correcto “A través de los huecos entre las estrellas –dijo él- miramos hacia atrás, hasta los orígenes del Universo”

Laura Rubio 1ºC